Si hay algo fácil de encontrar en Madrid es un bar, tasca o todo tipo de híbridos para tomar unas cañas. Desde los típicos bares normales, hasta las tabernas de sabor más antiguo, donde los vinos y el «delicatessen» suelen ser la especialidad.
1º. Taberna Angosta:
Se encuentra en la calle Mancebos, 6 (Metro La Latina). Es una de las tabernas del centro Madrid que han sido recuperadas por gente joven, conservando la decoración y la filosofía de las tabernas de toda la vida. La música está a la última y la gente que la frecuenta también. Además de un buen vino, se puede disfrutar de alguna de las especialidades de la saca desde patés variados hasta ensaladilla rusa, boquerones, croquetas, …
2º. Casa Labra:
Se halla en la calle Tetuán, 12 (Metro Sol). Es un lugar imprescindible par hacer un alto en el tortuoso camino de las compras por la calle Preciados. Su bacalao (soldaditos de Pavía) es famoso en el mundo entero desde 1860, fecha de la fundación de esta tasca. Según reza en un placa, en la trastienda de este establecimiento nació, de la mano de Pablo Iglesias, el Partido Socialista Obrero Español.
3º. El Anciano Rey de los Vinos:
Se encuentra en la calle Bailén, 19 (Metro Opera). Se trata de un local con solera y larga tradición, frente al Palacio Real, del que se cuenta que, en tiempos de la II República, suprimieron la palabra «Rey» del cartel de la fachada. Se pueden degustar vinos de todas las denominaciones, acompañados de tapas frías y calientes. Además, cuenta con ricos dulces como bizcochos, torrijas y pestiños.
4º. La Casa de las Torrijas:
Desde 1907 lleva funcionando esta taberna, sirviendo desde entonces bacalao,callos y calamares entre otras cosas, todo regado con el vino de la casa. La especialidad reina, sin embargo, son las torrijas, no hay que esperar a Semana Santa para comerse este rico dulce. Todo está como en sus comienzos : azulejos en las paredes y mesas con tableros publicitarios de la época.
Foto vía Sobre esto y aquello