Hasta el 17 de enero de 2016, el Museo Thyssen-Bornemisza presenta la exposición ‘Edvard Munch. Arquetipos’, la primera retrospectiva que se lleva a cabo del famoso pintor noruego en la capital de España desde 1984. Munch vuelve Madrid más de 30 años después.
Esta muestra, que se ha podido completar merced la colaboración del Museo Munch de Oslo (Noruega), está compuesta por una selección de 80 obras de este artista, considerado uno de los padres del arte moderno junto a otros prestigiosos pintorse Cézanne, Van Gogh y Gauguin, a causa de su contribución a la formulación de la sensibilidad artística. Asimismo, Munch sobresale como el icono universal de la angustia y la alienación del hombre contemporáneo.
Esta exposición quiere ampliar la imagen de la obra de Munch. Hoy en día, para mucho se ha convertido solamente en un prototipo de artista al borde del abismo, tal y como pasó con Van Gogh, y su obra se ha visto reducida a una única imagen, que tiene el privilegio de haberse erigido en un emoticono. Se busca que el visitante no pierde la esencia de la obra de Munch al quedarse en un solo cuadro por muy famoso que sea el mismo.
Algunas de las obras de Mucha que se podrán ver en esta exposición del Thyssen son ‘Atardecer’ (1988), ‘Melancolía’ (1892), ‘Madre e hija’ (1897), ‘Agonía’ (1915), la versión en lápiz litográfico y tinta china de ‘El grito’ (1895), ‘La niña enferma’ (1939), ‘Mujer’ (1925), ‘Pubertad’ (1914-1916), ‘Celos’ (1913), ‘Asesinato’ (1906), ‘Mujer vampiro en el bosque’ (1916-1918), ‘El beso IV’ (1902), ‘Bajo las estrellas’ (1900-1905), ‘El artista y su modelo’ (1919-1921) o ‘Desnudo femenino de rodillas’ (1919). Sin duda alguna, una amplia y notable variedad.
Por último, la exposición, que ya se puede visitar en el Thyssen, presenta dos aspectos vitales en la obra de Munch: la repetición temática y la experimentación técnica. Por todo ello, os recomiendo a acudir a esta excelente muestra que viene a reflejar la importancia de un museo como el Thyssen en Madrid.