Entre los bastantes museos que uno puede visitar en Madrid, el Museo Arqueológico Nacional destaca porque allí se aprende y se disfruta. Sea una mañana o una tarde, conviene acudir a este museo para apreciar el incalculable valor arquelógico que tiene España. Cuando lo visitamos nos adentramos en la historia desde la Antigüedad hasta los tiempos modernos.
No obstante, desde el pasado 25 de julio, el Museo Arqueológico Nacional permanece cerrado para agilizar los últimos trabajos de reforma del edificio. Su reapertura está prevista para finales de diciembre, una vez se concluya la primera etapa de la remodelación museográfica.
Ubicación, tarifas y horarios:
Se encuentra en la calle Serrano, 13, entre la plaza de la Independencia y la Plaza de Colón. En Metro, se puede acceder desde las paradas de Serrano y Retiro, y en la Renfe en la parada de Recoletos. Además, numerosos autobuses nos dejan cerca del Museo.
El Museo abre de martes a domingo de 9.30 a 20.00 horas (domingos y festivos hasta las 15.00 horas), cierra los lunes. La entrada es gratuita y se pueden concertar visitas guidas en grupo.
Historia del museo:
El Museo se creó en 1867 por Real Decreto de Isabel II. Se necesitaba disponer de un museo en el cual se pudieran conservar, clasificar y exponer los materiales arqueológicos, etnográficos, de artes decorativas y numismáticos que los reyes españoles habían ido acumulando.
Luego, este rico patrimonio se ha ampliando con compras, donaciones e ingresos de materiales procedentes de excavaciones arqueológicas realizadas en toda la geografía española.
Colección del Museo:
El Museo Arqueológico Nacional cuenta con más de 30 salas que abarcan numerosos períodos de la historia de España y otras naciones. Las principales colecciones son: Prehistoria, Protohistoria y Colonizaciones, Antiguo Egipto y Próximo Oriente, Grecia, Hispania Romana, Hispania Visigoda, Edad Media, Edad Moderna y Edad Contemporánea.
Entre su casi millón y miedo de piezas destacan varias como: momias y sarcófagos egipcios; la Dama de Elche; los Cuencos de Artroki; la Leona de Baena; el Sepulcro de Pozo Moro; el Toro de Osuna; la Dama de Baza; la estatua sedente de Livia, el Tesoro de Guarrazar; el Bote de Zamora; el Sepulcro de Doña Constanza de Castilla; y los ábacos neperianos.
Foto vía Guía Turismo